MEJORAR LA HABITABILIDAD A BORDO-ANTON LUACES

MEJORAR LA HABITABILIDAD A BORDO-ANTON LUACES

El dilema está planteado desde hace tiempo y, pese a ello, no se logran avances decisivos en el reconocido dilema del relevo generacional, ni en la adecuación de los buques de pesca a las necesidades del sector. Este ha sido claro y rotundo en las Jornadas Internacionales de Pesca sobre Grandes Migradores organizadas por la patronal Orpagu, trampolín utilizado por los responsables de Pesca de Galicia y España para explicar sus planteamientos ante Bruselas para que la UE reconozca los «GT sociales» como base para la mejora de la habitabilidad de los buques sin que el armador se vea en la necesidad de sacrificar la capacidad pesquera.

Así, pues, el arqueo de buques o toneladas de registro bruto de estos juegan actualmente un papel que puede ser decisivo como objetivo social a lograr a acorto plazo de tiempo si, como se dice, el relevo generacional pasa por una nueva normativa de titulaciones náutico-pesqueras y la necesidad de un nuevo enfoque de las ayudas comunitarias para favorecer las condiciones de trabajo a bordo. Estas pasan por dotar a las tripulaciones de acceso a Internet en los tiempos de ocio, la puesta en marcha de medidas tendentes a reducir ruidos y vibraciones y el cuidado de la ergonomía de los barcos. Para todo ello son necesarios los GT, porque en la actualidad se construyen barcos que son iguales a los de hace 30 años.

Bruselas debe apoyar y subvencionar las modificaciones que se pretenden en la habilitación de los buques sin que estas sean consideradas como una ampliación de la capacidad de pesca del barco en cuestión.

Galicia quiere atraer a las nuevas generaciones de tripulantes a la cadena mar-industria a través de la Formación Profesional Dual, pero el caballo de batalla está en la mejora de la habitabilidad de los buques. El Consejo de la Unión Europea ha aceptado una propuesta española que demanda la excepción al aumento de la capacidad individual del buque para mejorar las condiciones laborales y de seguridad a bordo, siempre y cuando no se inclemente la capacidad global a nivel del estado miembro. Por esto resulta fundamental disponer de las inversiones necesarias, en el marco del futuro Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca al que, según plantea Galicia, deben incorporarse medidas que contribuyan a hacer de un barco un lugar más acogedor y atractivo, barcos más conectados que posibiliten el uso de Internet y de una comunicación diaria con tierra y más habitables, con las condiciones laborales y de seguridad a bordo mejoradas.

Faltan capitanes y oficiales, especialmente. Y las condiciones que se ofrecen a estos mandos en la actualidad, no inducen a pensar en que el relevo generacional se soluciones en poco tiempo: de los 1.570 titulados formados durante los últimos diez años en las escuelas náutico-pesqueras de la Comunidad gallega, en gran medida han derivado a la marina mercante y no a la pesca. Esto tiene una lectura muy clara si queremos hablar de relevo generacional en el sector pesquero gallego.