RESULTA INDIGNANTE QUE LOS GALLEGOS SIGAN SIN VACUNAR, CONVIVIENDO CON VASCOS VACUNADOS EN EL MISMO BARCO
La Consellería do Mar de la Xunta de Galicia, al igual que la de Sanidade, desvelaron lo poco que les interesa la gente del mar al no mover un dedo para conseguir que los tripulantes de buques pesqueros fuesen una de las profesiones prioritarias a la hora de vacunarse, independientemente de la edad de las personas.
AETINAPE se dirigió hace dos meses a todas las consejerías autonómicas con litoral, así como al Ministerio de Sanidad, aún sabiendo que son las autonomías las que tienen competencias en este ámbito, para solicitar esta deferencia con la profesión marítimo pesquera, atendiendo a sus especiales circunstancias.
Como consecuencia de esa solicitud, únicamente la Consejería de Salud del Gobierno Vasco contestó que se tomarían como propia la sugerencia. La canaria respondió con una carta protocolaria y la gallega ni se molestó en responder, como ninguna otra.
De hecho, actualmente los arrantzales vascos están vacunados y los pescadores gallegos no, creando una situación bastante incómoda en los buques en los que coinciden, de la flota atunera sobre todo.
Resulta indignante que la administración gallega, de la que dependen más de la mitad de los pescadores españoles, ni siquiera se haya planteado ofrecer un tratamiento específico a estos trabajadores cuya relevancia en relación al conjunto de la población es insignificante, pero cuya inmunización ayudaría a normalizar la vida a bordo, ya de por sí muy sacrificada.
La duración de las mareas, el escaso espacio convivencial de los centros de trabajo, las condiciones de habitabilidad de los buques y la lejanía de tierra en los casos de los barcos de gran altura, estaban entre las razones que justificaban la vacunación de las tripulaciones.