XXII PLENO DE AETINAPE-SEMPRE TEMPO DE MAR

XXII PLENO DE AETINAPE-SEMPRE TEMPO DE MAR

SEMPRE TEMPO DE MAR:
Discurso del Presidente de AETINAPE, José M. Muñiz ante los 150 asistentes a este evento
Casa Museo Camaño Xestido “A MANGALLONA”
Coiro-Cangas do Morrazo
14 de diciembre de 2024
Alcaldesa de Cangas do Morrazo,
Presidente da Casa da Mangallona,
Queridas amigas e amigos todos,
Un año más volvemos, como cada diciembre, a invadir amable y amigablemente, un lugar de la costa para reafirmar nuestro compromiso con la profesión náutico-pesquera y reflexionar, debatir y hasta contraponer la realidad con el mundo que nos gustaría vivir.
Quiero antes de nada agradecer la cariñosa hospitalidad de este templo cultural de A Mangallona y de su alma máter, Camilo, quien ha puesto todo de su parte para celebrar nuestro evento en un entorno artístico y cultural de gran importancia, al que venimos con la humildad del amigo, la expectación del caminante y la armonía del hermano.
Rodearnos de creatividad, de artes plásticas, de pintura, de escultura, de tanta densidad artística como la que contiene esta casa concede a este acto un auténtico plus de calidad, pues todos y todas disfrutaremos con devoción del arte que aquí reside.
Y hacerlo en Cangas, con el mar de fondo y los ecos remotos de una historia marítima inigualable como la de O Morrazo, nos trae una vez más a nuestra casa más genuina. La de Vexo Vigo, vexo Cangas, la de Nos areais de Cangas a voz do vento xemía, hai que soíña quedaches, María Soliña… La de las danzas y contradanzas populares de Hío, Aldán o Darbo, auténtico patrimonio inmaterial de la cultura marinera de este gran país que es O Morrazo.
Gracias a todos y todas por vuestra estupenda acogida.
Somos una organización marítima veterana. Hemos tenido épocas de grandes conquistas en estos 42 años de existencia, sobre los que sólo podemos hacer balances positivos. Por muy venerables que sean nuestras arrugas y por lo difícil que sea que las nuevas generaciones de titulados se comprometan y participen en la vida asociativa, estamos seguros de mantener el timón firme, la frente despejada y la palabra libre, como siempre hemos hecho.
Hoy no somos una gran potencia pesquera. Lo hemos sido. Ni nuestros emprendedores ni nuestras administraciones han sabido convertirla en una plataforma de futuro, porque se dejaron ir por la rutina, nunca lucharon por el mar, fueron a lo fácil, a repartir prebendas y olvidarse de un sector primario minifundista y desestructurado, ya que no fueron capaces de revitalizarlo.
En definitiva, en estas cuatro décadas y pico el mar ha ido decayendo en España hasta llegar a la anecdótica sombra que es hoy, tan lejos de glorias pasadas.
Es cierto que no hemos cambiado sólo nosotros. En 40 años nos hemos convertido en un país más global. Europa nos ha convertido en un paseódromo de turistas, en un parque temático para jubilados del norte.
Los bienes materiales se traen de Asia, los alimentos de cualquier parte donde las empresas, entre ellas las nuestras, puedan explotar los recursos y a la gente a bajo precio. Lo poco que nos queda de producir o se trata de artesanías, o de pesquerías industriales anecdóticas.
Ya no hablemos del transporte marítimo, ese sector prácticamente desaparecido de nuestros balances laborales, entregado a una misteriosa maraña burocrática de estados basura donde se matricula sin control alguno la nueva piratería marítima.
Ahí enfrente hay una fábrica de coches, como sabéis. Mantener el empleo nos cuesta mucho dinero público, pues si no, se van a montar los coches a Sudáfrica o a Malasia. Ellos tienen fuerza laboral, son muchos y bien organizados y están concentrados en el mismo centro de trabajo. Ejercen su poder y presionan a las Administraciones para mantener sus empleos.
En el mar éramos más, estábamos más dispersos y no tenemos entre nuestros mandos ingenieros ni informáticos. Además no vendemos nuestro producto, que está en manos de una dudosa trazabilidad y de los grandes distribuidores de alimentos.
Las organizaciones representativas de los derechos laborales en el mar no existen… sólo algunas caricaturas insertadas en las estructuras del Estado para vivir de la política y fastidiar la vida del sector.
La vocación de AETINAPE desde nuestra fundación ha sido la independencia de todos los poderes políticos y económicos. Debéis saber que eso tiene un duro precio. El no estar en el pesebre del dinero público tiene un duro precio, pero también la consecuencia de presumir ufanamente de nuestra dignidad y nuestra libertad.
Qué decir de los políticos contemplativos que tenemos. Diputados en cualquiera de los tres parlamentos, autonómico, español y europeo. Su hoja de resultados marítimos da risa. Se convierten en héroes cada diciembre, diciéndonos lo mismo de siempre: que los recortes podían ser peores, que menos mal que frenamos a los ecologistas malos que nos persiguen.
De levantar el sector nada, de crear estructuras productivas, modernas y proveedoras de calidad de vida… eso sería soñar y pensar que esta gente tenía un compromiso real con sus representados, confianza en su país, al que acabaron entregando a los mercaderes.
No obstante, no es momento de ser pesimista. Si siempre hemos luchado por nuestra dignidad profesional, seguiremos haciéndolo como cuando conseguimos los avances en titulaciones, atribuciones, el Dispositivo de Separación del Tráfico Marítimo de Fisterra, el reconocimiento como fallecidos de los desaparecidos en accidentes marítimos, las mejoras en la seguridad marítima (aún siendo insuficientes)… entre otros muchos logros relacionados con la atención a tripulaciones o a la vida socioeconómica de la gente del mar.
Décadas de esfuerzo, de visibilidad marítima, de legendarias luchas, de debates profundos sobre el sector, de lucha contra la absurda burocratización impuesta por unas estructuras públicas que no conocen el mar ni de lejos y que producen paradojas como que actualmente existan muchos profesores en las Escuelas marítimas que no han estado embarcados nunca.
Ese es nuestro escenario difícil y al que hemos dedicado toda nuestra inteligencia colectiva, tratando de casar los mecanismos de la calidad de vida que se iban conquistando en el resto de la sociedad, con la evolución de los maltratados y marginados puertos pesqueros.
Pero es justo decir que en medio de todo eso hay empresas dignas, con empresarios decentes y comportamientos adecuados, aunque detalles como el mes libre remunerado por mes de trabajo realizado todavía sea una quimera, pues a nadie del Gobierno se le ocurre siquiera plantearlo como norma, por muchos años que llevemos pidiéndolo.
Prefieren mansas organizaciones viajeras que vean el mar desde el avión y adopten el papel orgánico de representación ficticia que necesitan los burócratas.
Ante ellos, nosotros firmes en todos los campos. Mirando de cerca los problemas, reclamando mejoras como las que por activa y por pasiva, con insistencia pertinaz, recuperamos tras el hundimiento del Pintanxo o del Argos Georgia.
Pero también episodios más cercanos como la necesidad de iluminar las bateas, un escenario de constantes siniestros que podrían aprovecharse, con el tratamiento adecuado, como atractivo turístico, creando sinergias económicas interesantes y fomentando el paisajismo nocturno.
Con políticas de seguridad. Con el adecuado refuerzo de las titulaciones, sin puertas traseras que sólo buscan aumentar los beneficios de unos pocos, poniendo en riesgo la seguridad de las tripulaciones, en lugar de reforzar el cumplimiento de los Convenios de la Organización Marítima Internacional (OMI) en materia de Formación, Titulación y Guardia para la Gente del Mar, Convenios de los que España es país signatario. Mimando a las personas, contribuyendo al bienestar de las comunidades marítimas. Acercándose a la realidad del mar, valorando sus especificidades y creyendo realmente en su futuro.
Este es el panorama que nos gustaría compartir. Lo que cada año venimos repitiendo con absoluta firmeza e insistencia.
Para eso nos necesitamos a todas y todos. Para ser más fuertes, para incorporar nueva gente, sabiendo que sin lucha colectiva no hay horizontes limpios, pues todo lo que somos lo hemos ganado con voluntad y esfuerzo a los burócratas y a la gentuza que surge donde menos te esperas al grito de qué hay de lo mío.
Una lucha de décadas con profesionales de todo el litoral español y en la que O Morrazo se situó en vanguardia, tanto por cantidad de personas como por calidad.
Personas que ya no están, pero no podíamos pasar por Cangas sin homenajearlas. José Manuel García Piay, José Oliveira, Manuel Prendes, Raimundo Calviño, Tino Guimeráns, Manuel Pesqueira ‘O Ferreiro’ o Agustín Pérez Ríos ‘Tinso’. Ellos, entre otros muchos que llevamos en nuestro recuerdo y en nuestro corazón, mantuvieron alta la bandera de AETINAPE en muchos frentes y en todo momento.
Permitidme poner mi agradecimiento en boca de Manolo Rivas:
O pouco que deus nos deu
Cabe nunha man pechada
O pouco convosco é moito
O moito sen vós é nada
Quiero agradeceros vuestra paciencia como siempre y desearos, también como cada año, que comencéis 2025 con la salud y la alegría que merecemos y la fuerza de siempre llenando nuestro pecho y nuestro corazón.
Os regalo, por último, estos versos del gran poeta de Cangas Bernardino Graña que sirven para desearos lo mejor:
Polo escuro do mar que vos contruba
aínda hai peixes de lus nos seus abrigos,
mariñeiros de Cangas, meus amigos,
meus irmáns de salitre e sol e chuva.
Muchas gracias, hermanos
FARO DE VIGO:

https://www.farodevigo.es/o-morrazo/2024/12/15/aetinape-lamenta-decadencia-pesquera-pleno-112626928.html

https://www.farodevigo.es/o-morrazo/2024/12/17/elogio-mar-mangallona-112679283.html

LA VOZ DE GALICIA:
O BARBANZA